*Este articulo fue originalmente publicado en la revista EcoLatino Marzo 2024.
La lectura es una de las herramientas más poderosas que le podemos brindar a nuestros niños. No solo es una fuente de entretenimiento, sino que también es un vehículo para el aprendizaje, la imaginación y el desarrollo del lenguaje.
Cuando leemos a nuestros hijos desde que son bebés, les estamos ofreciendo una valiosa ventana al mundo y poco a poco estamos cimentando el hábito de la lectura.
Beneficios de Leer desde Temprana Edad
Tal vez como padre, te estás preguntando: “Pero cuáles son realmente los beneficios de leer desde temprana edad? Por qué debo de invertir tiempo en leerle a mi chiquito si ni siquiera habla!” Aquí te explico algunos de los beneficios más destacados de leerle a tu bebe:
Desarrollo del Lenguaje y la Imaginación: La lectura en voz alta estimula el desarrollo del lenguaje y aumenta el vocabulario de los niños. Además, les ayuda a desarrollar una imaginación vívida, transportándolos a mundos lejanos y estimulando su creatividad.
Fortalecimiento del Vínculo Afectivo: Leer juntos fortalece el vínculo entre padres e hijos. Es un momento especial de conexión y afecto que fomenta la confianza y el apego emocional.
Preparación para el Éxito Académico: Numerosos estudios han demostrado que los niños que son expuestos a la lectura desde una edad temprana tienden a tener un mejor desempeño académico en el futuro. La lectura temprana proporciona una base sólida para el éxito en la escuela y en la vida.
Recomendaciones para Padres
Sin duda leerle a tu chiquito no siempre es lo más emocionante. Las historias pueden sonar repetitivas o la hora de la lectura es cuando todos están cansados después de un largo día! Sin embargo, ahora que comprendemos la importancia de leerle a nuestros chiquitos desde temprano, podemos buscar algunos métodos prácticos y sencillos para para fomentar este hábito en casa:
Crear Rutinas de Lectura: Establecer rutinas de lectura diaria es fundamental. Puede ser antes de dormir, después del baño, o en cualquier momento del día que funcione mejor para tu familia. Lo importante es hacer de la lectura una parte integral de la vida cotidiana.
Variedad en los Libros: Expón a tus hijos a una amplia variedad de libros: cuentos clásicos, libros ilustrados, poesía, libros informativos, entre otros. La diversidad de géneros y estilos les ayudará a desarrollar diferentes habilidades y gustos literarios.
Recomendación extra: Si tus niños son menores a 4 años, busca un libro que les guste, y lee este mismo libro todas las noches de la misma manera. A los niños les encanta la repetición, y escuchar el mismo texto cada noche hará que se familiaricen con el libro, el vocabulario, la historia y les dará un sentimiento de comodidad y confort porque conocen el libro.
Interacción durante la Lectura: No te limites a leer el texto. Haz preguntas, anima a tu hijo a hacer predicciones sobre la historia, discutir los personajes y los eventos. Haz preguntas abiertas que inviten a tener un diálogo sobre el libro. Por ejemplo puedes preguntar:
¿Por que te gusto el libro? ¿Cuál fue tu parte favorita de la historia? ¿Qué personaje fue el más interesante para ti y por qué?
La interacción durante la lectura no solo aumenta la comprensión del niño, sino que también hace que la experiencia sea más enriquecedora y divertida.
La lectura temprana es una inversión invaluable en el futuro de nuestros hijos. Al leerles desde una edad temprana, les estamos proporcionando las herramientas necesarias para triunfar en la escuela y en la vida. Así que no subestimes el poder de un cuento antes de dormir o una sesión de lectura improvisada durante el día. ¡Cada palabra cuenta en el maravilloso viaje hacia el mundo de la lectura!
Además de leer para tus hijos, es igualmente importante que los padres también se dediquen tiempo para leer por sí mismos. Los niños son excelentes imitadores y observadores, y ver a sus padres disfrutar de un libro les enseña el valor y el placer de la lectura. Cuando los niños ven que sus padres están interesados en la lectura, es más probable que ellos también desarrollen un amor por los libros. Convertir la lectura en una actividad familiar compartida, donde todos pueden sumergirse en historias y conocimientos, fortalece aún más el vínculo familiar y fomenta un ambiente en el que la lectura es valorada y celebrada. Entonces, no solo lean para sus hijos, también lean para ustedes mismos, ¡y juntos descubran el maravilloso mundo de la literatura!
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